De Menorca os voy a hablar; este cercano paraíso que te hace olvidar la jungla urbana por unos días. Nos embarcamos a la deriva Martí, Olau, Domènec, Torres y yo. Con la patera como medio de transporte, nos recorrimos la isal en busca de sitio donde dormir (playas, parques y jardines), lugares donde escalar (psicobloc en Binibeca, Acapulco, Cala Rafalet y Cales Coves) y un poco de fiesta para demostrar que aún somos jóvenes (Fornells, Ciutadella, Ferreries, etc etc etc etc etc...)
Tuvimos la suerte de navegar en dos barcos distintos, de naufragar e inspeccionar cuevas subterráneas. Conocimos gente de todas partes (bueno, la mayoría de Barcelona...) que nos acogieron bajo un techo y nos dieron comida y duchas. (gracias a todos)
A medida que avanzaba el viaje se unía gente y otra se perdía. Mi hermana estaba por allí trabajando desde hacía unos meses, nativa perdida, que también nos acogió y nos acompañó en varias ocasiones. Conocimos otros escaladores, como Pebrot (pimiento) y a sus niñas, Laura, Mireia, Andrea, Elena, Isidora, etc.
De psicobloc en sí no hizimos muchos días, un total de 6 o 7. Cada una de las zonas tenía unas formaciones calcáreas totalmente distintas. Mientra en Rafalet son todo buzones en fuerte desplome, en Cales Coves o Binibeca predominan los bidedos y las regletas sobre desplomes menos exagerados y placas técnicas. Apretar, había que apretar en todos los sectores.
El "punto rojo" del viaje me lo llevé yo, en nuestra primera visita a Cala Rafalet. Había una vía de unos 15m con un techo al final. El techo, situado a unos 13,5m del agua aproximadamente, medía unos 4,25m de largo (a grosso modo). Doménec lo había probado justo antes que yo, fallando en la salida con los brazos hinchados. Yo iba empotrando dentro del techo, talones y manos, hasta el fondo (eso tan recomendable que hay que hacer en un techo de psico). Suerte que me aconsejaron de no hacerlo. Ya en la salida del techo, voy con izquierda a una bola buena, tiene buen feeling para salir, así que, sin volar pies, le doy todo el peso y la muy puta se rompe. De forma que caí los 13,5m (aprox) con una aceleración de 9,8m/s2 (fijo) y de espaldas al agua, intentándome girar como un gato pero sin suerte. Aaaaaahh... respondí al flotar después del talegazo. Total, escupí sangre durante un buen rato y en hospital me dijeron que no era nada. Así que al día siguiente le volvimos dar.
